El clímax de cualquier esclavo. El placer de cualquier pagafantas. El deber de un perdedor que no vale más que para lamerle los pies a su Ama. Su Ama es Mistress Dalia, una chica que le encanta ver cómo sus esclavos aceptan ser humillados. Les hace lamer sus pies sudorosos mientras Ella se jacta de lo perdedores que son *jajaja*